viernes, 30 de mayo de 2014

¿Y ahora qué?





Pasado el contubernio electoral europeo, es hora de pensar en el mañana, de ser capaces de encarar las próximas elecciones locales como un solo ente, un solo Pueblo, o al menos la parte más consciente y responsable del mismo. Aunque el sistema electoral es casi una copa del europeo y los hándicaps o barreras, como se ha demostrado en estas pasadas, pueden sobrepasarse, el caso es que en comicios municipales e insulares, son menos insalvables.

Aunque a todos nos conviene no olvidar nuestras metas y no tenemos porque ocultarlas como si fueran un estigma, debemos también ser realistas, por lo que antes de plantear las grandes metas que buscamos (Descolonización, Independencia, Justicia Social, etc.), debemos tratar de iniciar el camino que nos conduzcan a ellas, comenzando por los problemas más inmediatos y acuciantes.

Quiero decir con esto, que sería un error presentarnos con un programa donde solo se contemplan los problemas generales de la Patria o Matria, y las grandes soluciones para los mismos, sino con soluciones sencillas y fáciles de entender por todos, a los problemas más inmediatos de hambre, paro, falta de viviendas asequibles, sanidad y educación deficientes e ineficaces, corrupción, ultra dependencia exterior, etc.
Estos son los problemas más acuciantes de nuestro Pueblo, entre otros, porque demandan soluciones más inmediatas, sin las cuales no se entenderían, ni siquiera estarían dispuestos a escuchar, que se les hablara siquiera de las soluciones globales a los Grandes males de la Patria o Matria, porque para ellos lo primero, es comer, un trabajo, etc. y no pueden esperar al futuro; Por tanto escucharán a cualquiera, como “Podemos”, que les dé la esperanza más o menos inmediata con soluciones sencillas, fáciles de realizar con voluntad y apoyo de la gente, y que son fácilmente entendibles por todos, sin que suenen a recetario clásico ni utopías irrealizables.
Lo que algunos llaman el fenómeno “podemos”, cuyo lema electoral es “soy español, soy español…”, paradójicamente ha venido a demostrar que el “régimen democrático- colonial español” no es imbatible, que se le puede vencer con sus mismas armas, que “podemos” a condición que logremos sintonizar con las demandas más inmediatas del conjunto de nuestro Pueblo. Educarlo y luego abrirse los ojos sobre nuestra realidad, llevará más tiempo, pero lo tendríamos de sobra si conseguimos hacer lo primero y ganar la confianza de este Pueblo.
Mayo 30 de 2014.

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